De todas las recetas que había, solo una de ellas era la más apetitosa y sangrienta para hacer, así que esta tarde ha llegado el momento.
Nos ha costado hacerla, sobre todo darle el color a la fondant, pero creo que hemos conseguido nuestro propósito o al menos ¡visualmente!, porque digestivamente es una bomba de azúcar.
Mmmmm :D
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